martes, 12 de julio de 2011

21 Kilometros





21 KM
Por Leo Mondragón

6:33 am. Todo tranquilo en la calle, salvo los cantos de los pájaros en los arboles y el leve zumbido del trafico que está empezando a despertar la ciudad. Hago un checklist mental rápido…I Pod y audífonos, ok, Nike App y playlist, ok, playera, ok, gorra, ok, licra, ok. money, ok. Tennis, ok. Todo lo material, ok. Es que esto de la corredera es entre dos, materia y físico. Físico y materia. El uno complementa el otro. La materia no corre sola. Necesita del físico. Es el complemento.

Ahora a checar la parte física. Estiro las piernas largamente, los brazos, la espalda, hago 20 jumping jacks, me tenso los tobillos, los suelto, estiro mis muslos y pantorrillas de nuevo, corro parado en mi lugar 30 segundos y listo! Hoy voy a correr un M&M…no, no es los chocolatitos, es un medio maratón. Le pongo play al pod, y la vocecita de la aplicación me dice alentadora al oído “Beginning Workout”. Suspiro hondo, y ahí voy!

Wow, se siente bien esto! La mañana no puede estar mejor, está nublado, no hace calor, no se siente mucha humedad, el clima perfecto! Mientras voy corriendo siento las agujetas de mis tenis…están un poco apretadas, si no corrijo esto va a haber consecuencias más adelante. Me paro y me arreglo las agujetas. Las aflojo un poco. Listo, ahí está!!! Se siente mucho mejor! Ahí voy de nuevo!

El thumpis thumpis de la música del I Pod suena en mis oídos mientras empiezo a circundar el Centro del Convenciones. Como muchas veces, me percato que de nuevo hay mucho excremento de perros. Los ricos de por aquí siempre hacen lo mismo, sacan a pasear a sus estúpidos animales para que no les dejen la mierda en sus enormes y fastuosas casas y condos. Triste, pero cierto. Son muy contadas las personas que a veces veo que sacan a sus perros a pasear y les van recogiendo sus gracias en pequeñas y graciosas bolsitas de plástico. A veces me pregunto porque la humanidad se ha rebajado tanto? Recogerle su caca a un perro? Les hemos enseñado tanto, a cazar, a pelear, a ser perros policías, a ser nuestros ojos en los casos de invidentes…porque nadie se ha puesto listo y los ha entrenado a recoger su shit? Sé que no tienen pulgares y el acto de levantar algo con sus patas sería imposible, pero por el bien de nosotros, algo se tiene que hacer! Hemos llegado a la luna, por todos los cielos! Es denigrante… A veces los veo por aquí, a las personas más ricas y poderosas de los alrededores, recogiendo lo que dejan sus perros y me da risa. Pero bueno, es un país libre. Creo. Todo esto pienso mientras voy esquivando las minas por toda la banqueta. Minas orgánicas.

-Three point five kilometers- me dice la vocecita del I Pod. Hora de dejar el Centro de Convenciones.

Me dirijo hacia Icacos por la Costera. Ahí voy, disfrutando del ejercicio, sintiendo el latido de mi corazón, empiezo a sentir el sudor empapando la parte superior de mi playera. Clima Cool según. Mis polainas, nada es clima cool, solo un truco publicitario. Las grandes compañías gastan enormes cantidades de dinero en tratar de hacerte guey, para que pienses que una tela se va a secar sola mientras la llenas de sudor. O sea, en qué cabeza cabe? Puras madres que! Pero trato de no pensar en ello.

Pienso en mi recorrido. Lo tengo todo planeado. Correr a un paso tranquilo y decente, entre 7.30 y 6.50 minutos por kilómetro. El recorrido lo voy a dividir en tres, bajando el ritmo a casi caminata cada 7 Km. para recuperar el aliento, y abastecerme de alguna bebida hidratante que comprare en el camino. En la bolsita de la licra tengo un billetito de 50 pesos enrolladito para este fin.

Ahí voy por la costera hacia la glorieta de Icacos. En el camino, varios antros arrojan a la calle sus desechos humanos. Paso frente al Baby O y ahí están los borrachitos, saliendo apenas de una noche de gran peda. Les sorprendería saber a quién he visto salir de dichos lugares vomitando sobre las jardineras. Las personas que mas admiramos de la farándula y las televisoras convertidas en piltrafas humanas por el alcohol y la desvelada. Y hasta drogas creo. Hoy no veo a nadie importante salvo a unos cuantos yuppies jóvenes que ya despilfarraron el dinero de papi y se están fletando unos “hochos” en el puestito de la esquina junto al hotel Tropicano. Hot dogs! Asco! ni cuando era pobre comía esas madres! Jejeje! Sigo mi carrera.

-Four kilometers completed- me dice la vocecita de la aplicación. Sigo mi camino, el tráfico comienza a aumentar en la costera. Veo a todos aquellas personas que van hacia sus trabajos en los grandes hoteles y negocios bajándose de todos los transportes públicos…taxis, combis, camiones. Todos van hacia las ocho horas o más que les esperan de friega en un Domingo cuando todos deberían de estar descansando, o haciendo un desayunito, haciendo ejercicio, o echándose el mañanero, o yendo a misa. Este es mi México de hoy, pienso, el México negrero…puto Gobierno pienso, estamos peor que nunca! Veo a toda mi gente caminando cabizbajos hacia la inclemencia de las ruedas de la esclavitud. Nadie debería trabajar en Domingo! Puto, puto Gobierno de shit! Sin embargo viendo todo esto, sigo mi camino.

Llego a la glorieta de Icacos, doy la vuelta en la otra acera del Grand Hotel, y prosigo mi carrera. Ahí voy, sintiendo los primeros síntomas de calor en mi cuerpo. Calor, calor!

-Five kilometers completed- me dice la voz del I Pod. 33 minutos recorridos, voy ok. A mi ritmo. Bien!

En mi mente, pienso que estoy a dos kilómetros del primer puesto de abastecimiento. Ahí voy, echándole ganas. El trafico ya aumento en consideración. Voy pasando todos los establecimientos de la costera mientras estos se despiertan de su letargo de ensueño…la Plaza Oceanic, las artesanías, el Ci-Ci, el Sr. Frogs, el Mc. Donalds, el Planet Hollywood y demás...

Llego de nuevo a la glorieta de Convenciones, paso los bancos que hoy no abren, y prosigo por toda la avenida hacia el Sanborn´s Condesa y el Vip´s. y ahí está el Oxxo. Mi primer puesto de abastecimiento.

-Seven point cero kilometers- me dice el I Pod…Me meto al Oxxo y compro mi primer Gatorade. De lima limón! Lo malo fue que el chamaco que me cobro me dio pura monedita de cambio. Prosigo mi camino con un monton de monedas en la bolsita de mi licra y sonando como alcancía. Pinché escuincle! Me torció! Ahora estas moneditas van a ir sonando todo el camino como campanita de vaca… qué pena! Pero ni pedo! Reduzco mi paso mientras me bajo la bebida…siento el liquido inundar mi sistema, tan rico y refrescante!

Avanzo en paso de caminata casi medio kilómetro…luego vuelvo a mi paso. Ahí voy, corre y corre como el Forrest Gump.

-Eight point five kilometers- me dice la vocecita. Wow! El cansancio se está haciendo presente en mi sistema, sin embargo, el hecho de venir a casi la mitad del camino me hace recobrar nuevas fuerzas. Voy pasando todos los demás antros de la costera, el Mojitos, el Barba Roja y los antros gay…veo salir de estos lugares a mas escorias humanas de diferentes sexualidades…Dios, que nos pasa a la humanidad! Me pregunto…ahí voy corriendo entre los que corren de sí mismos y sus vicios…una camioneta de basura está en la costera recogiendo toda la inmundicia de la noche anterior…no me sorprendería que algunos seres se treparan en ella, para que los lleven a donde se tira la mugre de la ciudad…

Sigo mi camino…ten kilometers me dice el IPod! Yei! A casi la mitad del camino! Paso el hotel Playa Suites y prosigo!

A estas alturas, ya vengo completamente empapado en sudor. Me quito la gorra y la exprimo. Wow! No manches! Esta super mojada! Me la vuelvo a poner, y me exprimo la playera! No manches, de donde sale tanto liquido! Yo de por si sudo un buen, en todo! pero hoy me sorprendí! Voy bien! me digo a mi mismo!

Paso la Gran plaza, con sus decenas de establecimientos…y me dirijo hacia el asta bandera! Mas gente, mas tráfico, mas corredores en la acera. Todos con un mismo fin. Extralimitarse. Esa es la palabra. Nadie corre de okis. Todos se están probando a sí mismos. Los veo y veo mi mirada en ellos. Y prosigo, llego al asta bandera! Yessss!!!

-Tuelv point faiv kilómetros…ya no escucho bien el I Pod…estoy sintiendo mucho cansancio, las piernas me empiezan a pedir descanso, y mi mente ya no piensa en claro. Avanzo un kilómetro por la misma acera de la costera junto al mar. Veo a los pescadores que están recogiendo sus enormes redes con mis hermanos atrapados en ellas, hacia una muerte segura que terminara en vendimia y lucro para unas cuantas familias de asesinos seriales, pues lo hacen todos los días no solo en Domingo, acabándose el océano, acabándose a mis hermanos los peces, acabándose la vida… y nadie los mete al bote…

-Fortin kilometritos complited- escucho al I Pod. Bajo otras circunstancias, siempre he maldecido el hecho de que hay un Oxxo en cada puta esquina de las calles del puerto, pero ahorita, con esta sed, es una bendición. Me compro otro Gatorade, pago con mi abundante cambio, y prosigo mi camino, a paso muy lento, mientras me tomo mi bebida! Ahí voy, corriendo a paso moderado sobre mis pasos, ya no veo los establecimientos ni lo que pasa a mí alrededor, tu recuerdo me llega a la mente en oleadas de sudor, de sudor lleno de sal…de sal del mar…

-Sicstin kilometritos al chaleco!- Wow! Ahí la llevo! Por un momento, pienso en la voz del I Pod, es sumamente agradable. Me imagino que esta chava de la voz ha de haber sido alguna estrella porno. O algo. De seguro ha de ser bien golfa. Sigo mi camino, el tráfico ya es intenso, el sol empieza a salir de entre las nubes. Uta madre, lo que me faltaba! Calor sobre calor! Y en este tramo no hay ni una pinche sombra!

Siento algo de desesperación. El kilómetro 17 siempre ha sido pesadísimo para mí. Voy corriendo y ya delirando por el cansancio…siento mucha sed, la boca seca, los inconfundibles síntomas de la deshidratación. Pienso en todos aquellos seres humanos perdidos en los desiertos del mundo buscando agua. Dios, que fea muerte para los que no la encontraron! Y para los que sí, no manchen, que chingona suerte! Miles han de haber muerto así…

Ya vengo delirando. -Eitin punto faiv kilomelitors recorridos- me dice esta chingadera…paso una tiendita y veo un anuncio de cerveza Indio…Dios, daría mi vida por una Caguama ahorita! Y unos taquitos de carnitas con cebollita y cilantro…por un segundo siento mi estomago dar un vuelco…y pararse ante el recuerdo que solo traigo menos de veinte pesos en cambio, con esto me paro en otro Oxxo y me compro mi ultima bebida hidratante…se me termina el dinero… prosigo mi camino…

A esta altura del recorrido ya vengo sudando todo. Las piernas, los brazos, los pies, la espalda, todo, todo mi cuerpo viene sudando. Hasta el ombligo me suda! Hay personas que no creen que el ombligo sude. Falta de criterio y sentido común! Si la cola suda, que no sude el ombligo! Vamos, sean abiertos! Son solo agujeritos…

Naintin-point-faib kilómetros me dice la golfa esta…estoy tan cansado, me siento al borde de la muerte…todo mundo se encomienda a un poder superior cuando sabes que se acerca el fin…desde siempre creo…en mi delirio me viene a la mente un cavernícola mientras le salta por la espalda un gatote esos de dientes de sable…que habrá dicho el pobre cabron? En ese entonces, las groserías no existían…no pudo haber gritado “a la mierda ya me cargo la chingada!!!” no, no creo…quien sabe que habrán dicho esos pobres cabrones me dije a mi mismo, Chuchito, ayúdame en esta mi encomienda! Ayúdame a terminar mi medio maratoncito! Siento que mi sangre esta en el punto de ebullición. No hay ninguna señal de viento, tan solo refresca un poco el aire que toco cuando paso. Siento tanto calor que puedo ver olas de calor surcando el cielo. Cada paso que doy siento como si las piernas se me fueran a deshacer como si fueran de chocolate.

Tuenti kilomelitros dice la vocecita…en eso, llega de pronto, un inmenso y enorme alivio, ya chingue! Ya los tengo! En este punto, se que el medio maratón ya es mió! Yeiiii! Hurrahhh! En mi cansada mente me llega una alucinación, me veo corriendo este ultimo kilómetro y entrando a un gran estadio, lleno de todas las personas que conozco! Todos! Mi reina y toda su familia junto con los suyos! Mis padres con mis hermanas y sus familias…Mis amigos, los amigos de mis amigos! mis compañeros de trabajo, mis clientes, todas las personas que conozco! Hay papelitos y globos volando por todo el aire del estadio! Todo mundo gritando al unisono! Wow, que chingon se siente esto! Único! Por los altavoces del estadio escucho mi nombre –Y aquí viene, desde Acapulco Guerrero, Leo Mondragón, mal escritor y seudo artista pintor, con 2 horas y 33 minutos de recorrido, démosle un fuerte aplauso por el esfuerzo!- el estadio estalla en jubilo! Hay varias camaras televisivas que se acercan para el close up de la meta. Una horda de reporteros se acercan con sus micrófonos todos queriendo mis primeras palabras. En una enorme mega pantalla me veo llegando a la meta, con el público en las gradas aplaudiendo con frenesi! Viva! Viva! Viva! .

Al pasar por la meta la vocecita de la aplicación me dice –tuentiuan kilómetros y cachito, congratulations! you just finished a half marathon!-

Alzo mis brazos en jubilo y triunfo! Lo hice! Lo hice! Yes!!! Si!!! Lo logre!!!

Volteo y estas tu mi reina, con tu sonrisota de oreja a oreja y aventándome un beso. Apago el I Pod! Se me salen las lagrimas por el esfuerzo y logro obtenido, y le doy gracias a mi Dios por darme esto, este sentimiento tan, tan chingon de logro! Voy hacia ti amor y me desplomo en tus brazos. Me tomas en tu regazo y me limpias el sudor de la frente y de mi cara, susurrándome cosas a mi oído. Todo está bien ahora. Ni la ciudad al despertar ni estos veintiún kilómetros ni todo el cansancio del mundo pudieron conmigo pues fuiste siempre la bandera que me guió!

Recupero mi aliento y abro los ojos. La imagen del estadio y los mios se ha ido. Regresan los árboles y el zumbido del tráfico en la calle. Ah! La vida, pienso…la vida tan bella a pesar de todo…

Estiro mis cansadas piernas y me voy a casa.

A seguir con la vida.

Fin.